Q:
¿Cómo se habla con Hashem?
A:
Esto te lo responderé de la siguiente manera. Al principio tienes que ser un hipócrita. Tienes que hacerlo superficialmente; tienes que decir las palabras. Y eso es lo que hacemos cuando hacemos tefilá. Estamos hablando con Hashem, aunque en realidad es קרוב אתה בפיהם ורחוק מכליותיהם. Eso es lo que dijo el Navi: “Estás cerca de sus bocas, pero estás lejos de sus riñones”, eso significa de su interior. Y esa es la verdad. Así es la tefilá, superficial.
Únicamente cuando un hombre se embarca sinceramente en una carrera de aprender a hablar con Hashem que su tefilá se vuelve significativa. Después de un tiempo cuando dices אתה, “Tú”, sientes que estás hablando con alguien. Y cuando llegue ese gran día, entonces sabes que lo has logrado.
Por eso, primero hazlo superficialmente. Sé un hipócrita. Por supuesto, es una buena hipocresía. Lo estás haciendo para entrenarte. Hablas con Hashem cuando puedes y le dices: “Te agradezco que Hashem me has hecho saludable”. Cuando ves a un hombre saltando en la calle con una pierna de pantalones vacía, y tiene muletas; y tú tienes dos buenas piernas y no necesitas muletas, entonces tienes que detenerte y decir: “Baruj Atá Hashem que tengo dos buenas piernas”. Ves a un hombre caminando en la calle con una manga vacía que se encuentra en el bolsillo, entonces tienes que agradecer a Hakadosh Baruj Hu que tus mangas no están vacías.
Y poco a poco te acostumbrarás a decir las palabras, y después de un tiempo sentirás que hay que alguien que te escucha. Eso es lo que dice el Mesilat Iesharim, que al principio lo dices y, después de un tiempo entra en tu mente. Porque tienes un instinto que todos los seres humanos tienen que Hashem está en realidad allí y te está escuchando.
CINTA #317 (julio de 1980)