Q:
Si un niño llega todos los días a casa pidiendo un televisor, ¿debemos dejarlo ir de vez en cuando a casa de un amigo para evitar que se rebele?
A:
Y la respuesta es, supongamos que un niño quiere comer algo no kosher. Se le hace la boca agua por comer algo taref. ¿Te rendirías ante él de vez en cuando?
Y el terefut de la mente es cien veces peor que el terefut que comes con la boca.
Esa es la respuesta.
Debemos saber que la televisión, especialmente hoy en día, es mamash taref como manteca de cerdo, como jazer schmaltz. Y ni siquiera debería pasar por nuestras mentes que un niño debería ver TV de vez en cuando.
CINTA #E-16 (junio de 1995)